jueves, 13 de febrero de 2014

El Maravilloso Mundo de la Motivación

   La motivación, que es la herramienta psicológica principal de la creatividad, puede ser debida a factores intrínsecos y extrínsecos; que son los que determinan cómo realizamos las acciones en función de nuestro interés o voluntad, lo que nos permite realizarnos tanto personal como profesionalmente. La motivación intrínseca proviene del interior de uno mismo, cuando realizamos alguna actividad que nos gusta o agrada, a pesar de que sea complicado realizarla o incluso ilegal, pero nos hace disfrutar el sólo hecho de hacerlo. La motivación intrínseca depende mucho de nuestro estado de ánimo. Nuestro organismo reaccionaría de la siguiente manera ante estos estímulos:

-          Fácil concentración
-          Empleamos todo nuestro esfuerzo, ya que anhelamos realizarlo perfecto
-     No lo hacemos por dinero ni por ningún tipo de recompensa

   A veces tenemos que realizar actividades que no nos hacen disfrutar, es aquí cuando empleamos la motivación extrínseca. Este tipo de motivación proviene del exterior, consiste en realizar una tarea que nos disgusta, pero que accedemos a ella a cambio de una recompensa final. Se dice que esta motivación es superflua o vacía, pero es la mejor forma que tenemos de funcionar los seres humanos. Es el tipo de motivación que nos hace que nos levantamos por las mañanas para ir a trabajar, no nos apetece, pero sabemos que a final de mes todo ese esfuerzo será recompensado monetariamente. Principales características:

-          Es más difícil la concentración
-          Pretendemos terminar las tareas cuanto antes, por lo que no nos centramos en realizar la tarea de la mejor manera posible
-    Sino hay una recompensa estaríamos negados

Las Necesidades Humanas

La motivación se ha convertido en los últimos años en la gasolina que mueve a la sociedad, la evolución de las sociedades ha provocado que necesitemos explicar cómo funcionan nuestras preferencias y deseos hasta satisfacernos personalmente, ya que nuestras acciones se verán condicionadas. En este sentido, el psicólogo Abraham Maslow, agrupa las necesidades humanas en 5 niveles, en la famosa pirámide de Maslow, donde no puedes pasar al siguiente nivel sin haber satisfecho previamente los anteriores, hasta llegar a la autorrealización plena.

Nivel 1: Necesidades Básicas

Se incluyen las necesidades fisiológicas básicas para mantener la vida humana y la supervivencia de la especie. Son la alimentación, respiración, necesidades internas de regular la temperatura, evitar el dolor, mantener el equilibrio, expulsar los desechos de nuestro organismo y tener relaciones sexuales.

Nivel 2: Necesidades de seguridad y protección

Una vez satisfechas las necesidades del primer nivel, en los seres humanos aparecen las necesidades de seguridad y protección. Son la seguridad física, la salud, el tener un empleo que garantice mi mantenimiento… Así como también la seguridad moral, el núcleo familiar y la propiedad privada, tener un hogar.

Nivel 3: Necesidades de afiliación y afecto

Se trata del desarrollo afectivo entre los miembros de una sociedad, es decir, necesitamos el sentimiento de estar aceptados o integrados en la sociedad o en un grupo de la misma. Dentro de este nivel se incluyen actividades deportivas, culturales y recreativas; siempre que impliquen amistad, compañerismo, afecto y amor.

Nivel 4: Necesidades de estima

Según Maslow, hay dos tipos de necesidades de estima, alta y baja. La estima alta se refiere a la necesidad del respeto a uno mismo, la comunicación interna y la autocomprensión que tenemos; necesitamos sentir confianza, competencia, maestría, logros independencia y libertad. La estima baja se trata del respeto que sienten los demás hacia nosotros mismos, es decir, el reconocimiento, el respeto, reputación, dignidad e incluso dominio del resto de individuos de nuestra sociedad.

Nivel 5: Autorrealización

En este nivel se encuentran las necesidades más elevadas, se hallan en la cima de la pirámide, y sólo a través de su satisfacción se le encuentra un sentido a la vida. Para alcanzar este nivel se deben de haber completado todos los niveles anteriores.

El Diseño Creativo en Sociedad

   El término diseño es hoy en día plurívoco, es decir, tiene varias interpretaciones; pero de una forma general se podría definir como un interfaz entre el hombre y el mundo que interrelaciona el diseño y la sociedad. Habitualmente el hombre se relaciona con espacios, objetos y símbolos, lo que genera la necesidad de hacer ésta relación útil y productiva, dando lugar a los tres campos principales del diseño: gráfico, industrial y de espacios.


   Una vez introducidos en el concepto del diseño, hemos de plantearnos el sentido que tiene el diseño en nuestra sociedad. Para algunos, el diseño representa lo racional y funcional, simplificando lo máximo posible para optimizar el uso de las producciones (Modernismo); aunque para otros, el diseño se sitúa en un mundo irreal e irracional, donde prima la extravagancia, destacar sobre los demás (Postmodernismo). Lo que nos conduce a lo que podría llamarse la crisis creativa del diseño. Por eso, se debería autorregular, crear una organización que lo estructure atendiendo a los elementos principales que hacen que los valores y las energías de esta profesión circulen productivamente, promoviendo una función crítica y orientadora para los futuros diseñadores y en el bien común de la sociedad.

   En palabras de Belluccia: El perfil del diseño en una sociedad está condicionado por el perfil de quienes lo demandan. Determinar qué se diseña, para qué se diseña, qué contenidos transmiten los objetos que se diseñan no es responsabilidad de los diseñadores. En mi opinión, el diseñador, además de ser un partícipe más en la sociedad, es un profesional del medio, por lo que debería tener la suficiente competencia y responsabilidad de opinar y producir el diseño que va directamente a la uso cotidiano.